For my meeeef!

Como me dijiste que no actualizaba casi nunca, esta va para ti, a que no te lo esperabas? Lo sé, porque soy super mega guaaaaaay!
Pues, que te voy a decir yo? Si ya lo sabes todo, pero te gusta que te diga que me muero por tus carnes IRLANDESAS, eeeeh!
Que te quiero musho musho, y me lo paso genial con tus monos violadores asesinos, con tus lentillas malditas que no quieren entrar en mis ojos, con la comida que me daaaas!
Y que echo de menos tenerte en clase para que mis dias sean perfectos porque estés tu en ellos, petarda!
Y que maas, que maaaas? AAH CLARO! Que siempre quedará en el recuerdo a la pequeña Brenda que tanto amor nos dió en su momento, y también tengo que decirte que si, lo admito, TE QUIERO! Y por si no queda claro, lo vuelvo a repetir, TE QUIERO! Y lo siento, pero tendrás que aguantarme toda tu vida, porque si no soy tu amiga yo me moriré, y tu no quieres que me muera, verdad? Verdad que no? Claro que no! :)
Y, umm.. estoy escuchando RATM, porque molan mucho, pero no más que yo, aunque si más que tú, pero no importa, así que tranquila.
Y quiero que te quede una cosa bien clarita: Nuestros ojos con lentillas son muy bonitos, valee? :3
Y nada más cosita, que como todo lo que te tengo que decir te lo digo siempre a la cara, pues no hace falta que escriba más.
Gracias por darme un abrazo siempre que lo necesito y por estar ahí cuando quiero reirme mucho mucho.
Gracias por aparecer un día en mi vida, así como si nada, en plan, hola, soy Martha y no vengo casi nunca a clase.. xd Pero después llegó tercero, ese fabuloso tercero en el que nos hicimos muy muy amigas, y que no olvidaré NUNCA!
Te love you meef meef ♥

Construcción.

Le llamas a las 3 porque quieres cambiar todo lo que sucedió. Que estás harto de la monotonía, que quieres morir súbitamente. Y todo esto pasa últimamente.
Cuando llega donde estás tú, vestido para gustarle, le invitas a salir y el mundo se acelera. Dando vueltas por cien mil bares para acabar en esa noria. Ella pensaba que dudaba al seguirte a todos lados, pero se dió cuenta que te seguía por miedo a perderte y no saber donde estás.
Y terminar tumbados en el suelo mirando hacia el cielo. Solamente quedaban razones, y ellas echaron a volar.
Pero llegasteis a la parada del tren en la que tenía que bajar y no entendías que no podía seguirte. Recuerda como le dijiste que era de otro mundo, que erais opuestos. Debe ser muy kamikace, aún espera que vuelvas.
Empezar lo que nunca acabó. Sabe que si pasa, se hará la guerra, pero arriegará a sus hombres por acabar con ella.
Y sin dudar, te sigue a todos lados y desea acabar el camino en un parque, sentados al pie de un árbol. Ahora sabe que aquello eran buenos tiempos.
Y que más da que ya no hayan razones de nada, hay esperanzas en todo.

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Y ahora, que después de mucho tiempo, abro las ventanas, veo a través de los cristales una tormenta que parece que no parará por mucho tiempo.
Me tocará mojarme y sentir el cambio.